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Los mercados se enfriaron después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, nombrara a Jerome Powell como presidente de la Fed.
La caída, especialmente en las acciones, detuvo el repunte del dólar, que ha estado creciendo recientemente frente a los activos de riesgo. Pero las sólidas estadísticas en la zona euro no ayudaron a los compradores de euros a regresar al mercado, ya que el riesgo de otro brote de COVID-19 deja una gran posibilidad de una nueva caída.
Esta semana, el comercio se rezagará debido a la celebración del Día de Acción de Gracias en los Estados Unidos. Pero las tasas aún pueden cambiar en medio de la publicación de las actas de la reciente reunión de la Fed.
Lael Brainard también fue nombrada vicepresidenta de la Fed y trabajará con Powell para lograr el máximo empleo. Muchos la ven como alguien que hace todo lo posible por el mercado laboral, especialmente cuando dijo en una entrevista reciente que tiene la intención de poner a los trabajadores en el centro de las políticas de la Fed y que no se pasará por alto el rápido aumento de los precios al consumidor.
El presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, dijo que el banco central podría necesitar reducir el estímulo para frenar la inflación y ayudar al empleo a regresar a su nivel anterior a la crisis. Pero si la Fed hace esto, las tasas de interés deberán elevarse antes de lo planeado.
"Una reducción más rápida ciertamente nos daría más opciones a medida que avanzamos hacia 2022 y veamos a dónde nos llevan los datos", dijo Bostic. "Definitivamente creo que es apropiado para nosotros hablar sobre el ritmo de reducción y estar abiertos a uno más rápido".
Lo más probable es que los funcionarios de la Fed discutan el tema durante la reunión de política del 14 al 15 de diciembre. El vicepresidente Richard Clarida, el gobernador Christopher Waller y el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard, dijeron que se podría considerar una reducción más rápida durante la reunión.
Mientras tanto, en Europa, el sector privado en Francia supuestamente alcanzó un máximo de cuatro meses en noviembre, gracias a la fuerte expansión de los servicios. El IHS Markit dijo que el PMI compuesto subió a 56,3 puntos, mientras que el PMI de servicios subió a 58,2 puntos. El PMI manufacturero, por otro lado, llegó a 54,6 puntos.
Alemania también experimentó un aumento bastante rápido en el rendimiento, con el PMI compuesto elevándose a 52,8 puntos y el PMI de servicios subiendo a 53,4 puntos. Pero el PMI manufacturero cayó a 57,6 puntos debido a las continuas presiones inflacionarias.
No obstante, los datos globales de la zona euro mejoraron en noviembre, compensando ligeramente el descenso observado en octubre. El PMI compuesto se sitúa en 55,8 puntos, mientras que el PMI de servicios se sitúa en 56,6 puntos. El PMI manufacturero también subió a 58,6 puntos.
Pero el BCE todavía está considerando una reducción debido a las severas presiones inflacionarias. Temen que la economía retroceda nuevamente si los gobiernos se ven obligados a implementar nuevas restricciones debido a la pandemia de coronavirus. Los miembros de la junta del BCE Isabel Schnabel y Klaas Noth propusieron aumentar la vigilancia contra la amenaza de picos de precios. "Los riesgos para la inflación están sesgados al alza", señaló Schnabel. Mientras tanto, Knot dijo que el impacto sobre la inflación será más ambiguo "porque también podría aumentar algunas de nuestras preocupaciones sobre los problemas de la cadena de suministro".
El reciente informe mensual del Bundesbank también indicó notas más alarmantes que antes, y los economistas advirtieron que los datos de inflación de la próxima semana podrían mostrar un crecimiento cercano al 6%. La canciller alemana, Angela Merkel, también pidió a las autoridades que introduzcan nuevas restricciones para frenar el aumento de las infecciones por COVID-19 en el país.
En la actualidad, el programa de compra de bonos por valor de 1,85 billones de euros, lanzado en los primeros días de la crisis, ya eliminó muchos de los problemas de la zona euro. Pero los funcionarios del BCE aún no han llegado a una conclusión sobre qué hacer después de su finalización en marzo del próximo año.
Hablando del EUR/USD, mucho depende de 1,1230 porque una ruptura conducirá a una caída a 1,1190, 1,1150 y 1,1100. Mientras tanto, una subida a 1,1315 provocará un salto a 1,1360 y 1,1420
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